El Banco Central de Honduras realizó un pronóstico alentador para la economía del país centroamericano, con un crecimiento positivo y una disminución en los niveles de inflación.
La economía de Honduras crecerá entre el 3,5% y 4% en 2023 y 2024, mientras que la inflación se ubicará entre 6% y 7% este año y entre 4% y 5% el próximo, según proyecciones del Banco Central de Honduras (BCH).
El organismo monetario publicó en su Programa Monetario 2023-2024, que detalla que el crecimiento del producto interno bruto (PIB) real se ubicará este año y el próximo entre 3,5% y 4% debido a la coyuntura económica nacional e internacional.
El crecimiento en 2023 estará respaldado por «la evolución del consumo privado apoyado por los ajustes salariales, comportamiento favorable de las remesas familiares y el crecimiento del crédito, así como mejora de la inversión pública dirigida a programas y proyectos del sector energía, infraestructura vial, productiva y social, complementado con el mayor gasto social focalizado».
Para 2024, la actividad económica mantendrá el mismo dinamismo de 2023 debido a un mayor consumo privado, destinado principalmente a la compra de alimentos y bebidas, dado los mayores ingresos de las empresas y hogares, precisó el BCH.
Además, el impulso de la inversión privada por la mayor ejecución de proyectos, aumento de la inversión pública, producto de los avances previos en las etapas de factibilidad de los proyectos de infraestructura y la aceleración de las exportaciones derivado de la mayor demanda externa del banano, camarones, tilapias, melones, sandías y bienes manufacturados (prendas de vestir y arneses).
La inflación continuará «reduciéndose en el transcurso de 2023 a medida que se desvanezcan los choques de oferta global», previendo que se mantenga «por encima del límite superior del rango de tolerancia» establecido por el BCH (4%) para este año y el 2024.
El emisor del Estado indicó que los pronósticos presentan «riesgos considerando la persistencia y volatilidad de los choques de oferta».
También apuntó que las remesas enviadas principalmente de Estados Unidos, crecerán un 8,5% en 2023 y el 8% para 2024, asociado al comportamiento previsto en el mercado laboral estadounidense. Las exportaciones mostrarán en 2023 «menor dinamismo» con relación al 2022, en línea con «la desaceleración esperada de la actividad económica mundial».
No obstante, el organismo hondureño, espera una recuperación en la economía para 2024 y además, vaticina que las importaciones también registrarán «un menor crecimiento» en los próximos dos años debido a la menor demanda agregada interna, así como a la disipación prevista en los choques de precios registrados en 2022.
Las autoridades hondureñas proyectan también un déficit en la cuenta corriente de 3,8% del PIB en 2023 y del 3,5% en 2024.
El Programa Monetario afirma que este déficit de cuenta se deberá a que la posición externa del país se mantendría fortalecida por el hecho de mostrar una cobertura igual o mayor a cinco meses de importaciones de bienes y servicios.
El Banco Central de Honduras aprobó medidas encaminadas «a mejorar la certidumbre y equidad» en la asignación de divisas para los distintos agentes económicos y la población, con lo que se reactivó la subasta de divisas.
FUENTE: OPI.
