Gabriela Espino Ramírez y Neri Pérez son dos estudiantes mexicanas de Ingeniería Química Industrial que lograron desarrollar un combustible útil a partir de aguas negras.
Comenzó como una tarea escolar y ahora es uno de los proyectos más prometedores de este 2024 en cuestión de sustentabilidad en su país. La inventiva de dos estudiantes mexicanas ha dado lugar a un combustible limpio, útil a partir de un tratamiento especial de aguas negras. Se trata del prototipo titulado Gimfi, que en otomí significa “agua sucia”, creado por Jeimmie Gabriela Espino Ramírez y Lisset Dayanira Neri Pérez, dos estudiantes de Ingeniería Química Industrial, del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Este artefacto se compone de un purificador y un electrolizador, los cuales aprovechan las afluentes de aguas negras y ríos contaminados para producir combustible limpio. El mecanismo y su maravilloso efecto práctico es que puede estar fijo o portátil. Pues también lograron crear un tamaño adecuado para el hidrolizador, lo que le permite su fácil transportación y movimiento.
Tiene un filtro con capas de algodón, mármol, grava, arena, carbón y tezontle. Y su función principal es retener sólidos de gran tamaño y partículas orgánicas.
El líquido que se obtiene posee más minerales incluso que el agua potable. Este prototipo ha sido desarrollado durante tres años bajo la supervisión y asesoría del profesor e investigador Martín Daniel Trejo Valdez. Las estudiantes mexicanas y su guía buscan que el aparato sea utilizado en zonas de alta marginación del país como Guerrero y Oaxaca.
“Este tipo de purificadores podrían generar su propio combustible a partir del agua residual, sólo bastaría con recolectar agua sin importar su grado de contaminación”.
declararon las jóvenes inventoras.
Combustibles a base de aguas negras
Otro buen exponente de combustible renovable es el conocido como HVO, aceite vegetal hidrotratado por sus siglas en inglés. Éste se produce a partir de aceite vegetal o grasas animales que se refinan con hidrógeno, bajo la influencia de un catalizador para aumentar su calidad, convirtiéndolo en un combustible para motores diesel. Asimismo, se puede emplear directamente en los motores y contamina menos que los carburantes tradicionales. De hecho, ya se utiliza en camiones y autos en los países nórdicos.
Dos pasos gigantescos para sustituir los combustibles tradicionales, cuya contaminación es responsable de alrededor de 4.5 millones de muertes de animales en todo el mundo anualmente, de acuerdo con datos de Greenpeace.
FUENTE: Wokii.
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